Final Fantasy VII Remake

Volvemos con el repaso de Final Fantasy VII Remake.
Fue allá por 1997 cuando Square Soft publicó por primera vez el séptimo capítulo de Final Fantasy, logrando romper inmediatamente el corazón de los jugadores. Ahora, 23 años después, y con una gestación más convulsa que nunca, Final Fantasy VII Remake está finalmente disponible y lo hemos analizado a fondo.
UN REMAKE AL PASO DE LOS TIEMPOS
Ha pasado mucho tiempo así que, les digo fanáticos de toda la vida, no encontrarán el mismo título que entonces. Los cambios más importantes han sido, como debería ser, en el sector visual del título, con una reconstrucción en alta definición de la ciudad de Midgar y una caracterización detallada de los distintos personajes.
Sin embargo, la historia también ha sufrido cambios menores. Quieres la división en episodios de este remake, especialmente este capítulo inicial que resume los eventos en Midgar en las primeras 5 horas del juego original pero puedes estar seguro porque no encontrarás muchas adiciones para alargar la sopa.
El comienzo del juego es siempre el mismo: el mercenario Cloud Strife es contratado por el grupo de ecoterroristas conocido como Avalanche para atacar a la empresa energética Shinra, con sus reactores rodeando la ciudad de Midgar, acusada de drenar la energía vital del planeta, la energía mako. Cloud pronto se verá más involucrado de lo esperado y también tendrá que lidiar con una pesada sombra del pasado.
El foco de este remake se ha desplazado de forma decisiva a la narrativa, y el corte cinematográfico adoptado consigue sumergir por completo al jugador dentro de las escenas vividas, además de dar una mayor caracterización a los personajes, incluso a los de menor importancia como Biggs, Jessie y Wedge.
Abandonados entonces los rigurosos cánones del anticuado JRPG, nos encontramos ante un título muy cercano a la acción en tercera persona, como God of War solo por dar un ejemplo reciente.
SISTEMA DE JUEGO Y COMBATE
Final Fantasy VII Remake no es un mundo abierto, de hecho, con algunas pequeñas excepciones, hay muy poca libertad de acción para los jugadores. Solo en algunos de los 18 capítulos que componen este primer episodio, los jugadores podrán moverse libremente porque podrán dedicarse a completar las misiones secundarias, de lo contrario se encontrarán ante largos “pasillos” llenos de peleas y escenas de corte.
El sistema de combate abandona la naturaleza estática de las peleas por turnos para adoptar un estilo más de acción, con la mecánica de Active Time Battle regresando en forma de barras recargables con el tiempo o atacando o recibiendo daño usado para realizar hechizos y habilidades especiales de personajes individuales.
El título empuja al jugador a cambiar constantemente de un personaje a otro, adoptando las mejores estrategias para acabar con cualquier enemigo, desde los jefes más débiles hasta los más difíciles. Precisamente por eso, la inteligencia artificial de personajes inactivos no es la mejor.
Finalmente, el tiempo prácticamente se detiene cuando abres el menú de selección de ataques y habilidades. De esta manera, el jugador tiene más libertad para pensar en la secuencia de ataques a lanzar.